Seguimos sin conocer cómo se calcula el cupo (esa partida alzada)

Esta noticia de Carlos Segovia, en elmundo.es:

Sánchez da al PNV cinco años del ‘Cuponazo’ que Montero veía «un privilegio injustificado» cuando era consejera andaluza

 La ministra de Hacienda recaba el apoyo del PNV a los Presupuestos al aceptar extender sin cambios la ley de Montoro que ella reclamaba «recalcular» para evitar agravios”

me recuerda un anterior post

Yo me moriría feliz si supiera cómo se calcula el cupo

sobre la opinión de un especialista en el cupo vasco.

Me parece que el cupo no es otra cosa que lo que los técnicos de la construcción denominan una partida alzada: Unidad de obra cuyo precio se fija en una cifra arbitraria, a diferencia de aquellas que son el resultado de una evaluación rigurosa y sistemática, en función de la medición.

Puede leerse también lo siguiente, en esta información de Toni Bolaño, Javier Gallego y Mirentxu Arroqui en larazon.es:

Sánchez salva las cuentas con el apoyo de Esquerra y PNV

El Gobierno se compromete a renovar el cupo vasco y el presidente escenifica su voluntad de reformar el delito de sedición en Bruselas

Así las cosas, el PNV ha vuelto a conseguir un importante botín: el Gobierno se ha comprometido a renovar la Ley Quinquenal del Cupo, que caducó en 2021 y que sirve para calcular cuánto aporta la Hacienda vasca (que recauda todos los impuestos del sistema fiscal español en el País Vasco) a la Hacienda española cada año para costear los gastos de las competencias que no están transferidas (Defensa o Exteriores, entre otras). Con esa Ley, aprobada en 2017, se estableció el cupo base en 1.300 millones de euros anuales (200 millones menos que los años precedentes), y ahora el PNV exige que se mantengan los «mismos parámetros» de cálculo (a esos 1.300 millones se le aplica un índice de actualización que hace variar anualmente la cifra total del cupo en función de la recaudación tributaria). El acuerdo alcanzado en este sentido pasa por que se reúna la Comisión Mixta del Concierto antes del próximo 20 de noviembre para acelerar los trámites legislativos y los nacionalistas vascos aspiran a materializarlo ante el temor a que se produzca una situación de «inseguridad jurídica» y pueda quedar dinamitado el pacto fiscal actual, ya que incluye mucho dinero en juego”.